J.F. Navarro. Un horno para cemento. 1896
Patente 19765 Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Oficina Española de Patentes y Marcas. Archivo Histórico
1852-1890 Expansión de la industria del cemento artificial
1852. H. Bleitbreu fabrica el primer Portland alemán en Stettin
En Alemania, Hermann Bleitbreu comenzó a fabricar Portland a partir de 1852 en su fábrica de Stettin, en Prusia, y más tarde en Bonn. Su excelente calidad desplazó prácticamente al Portland inglés en la zona y fue reconocida internacionalmente. En 1867 su competidor
J.H. Hagenah, de la empresa Hemmoor, partiendo de un primitivo yacimiento de cemento natural, comenzó asimismo a fabricar un Portland artificial, que llegó a ser de los más solicitados. Ambas empresas abastecieron el mercado alemán y exportaron a todos los países del mundo.
Comienza la fabricación de cemento Portland en Francia, en la factoría de Boulogne-sur-mer
Países como Italia o España se incorporaron más tardíamente
a la fabricación de cemento artificial, algo en lo que seguro tendría que ver la existencia de excelentes cales y cementos naturales
La fabricación de cemento Portland tardó algún tiempo en extenderse en Francia. En1857 en Francia sólo Demarle y Cia lo fabricaban en su factoría de Boulogne-sur-Mer, siendo conocido como “Portland francés”. La potente cementera Pavin de Lafarge no lo fabricó hasta 1869. Otros países como Italia o España se incorporaron más tardíamente a la fabricación de cemento artificial, algo en lo que seguro tendría que ver la existencia de excelentes cales y cementos naturales. En Italia,
a partir de 1885, la Sociedad Anónima de Cales y Cementos de Monferrato empezó a producir cemento artificial con regularidad. En España, la primera fábrica de Portland fue la asturiana de Tudela Veguin, en 1900.
1885. En Estados Unidos, F. Ransome inventa el horno rotatorio, el más avanzado para la fabricación de cemento Portland
Hasta 1880 el cemento se fabricaba por vía húmeda. A grandes rasgos se hacía mezclando la caliza y la arcilla con agua para formar una pasta húmeda, que se cocía en hornos verticales. Pero los hornos, enormes y muy costosos, daban escaso rendimiento y generaban grandes pérdidas de calor, resultando la cocción bastante irregular. Tras distintas propuestas de mejora, como los hornos de pisos del alemán Dietzch, en 1885 la innovación definitiva llegó en 1885 de la mano del técnico inglés Frederick Ransome (1818-1893) y sus hornos rotatorios. Los hornos de Ransome estaban formados por una caja cilíndrica de acero o palastro, revestida interiormente de buen ladrillo refractario, y dispuesta en ligera pendiente con la horizontal, apoyada sobre rodillos de acero.
El horno se hacía girar por medio de un tornillo sin fin, y la mezcla, que se introducía en seco
iba desplazándose con el movimiento circular, mientras se calcinaba de forma regular
y homogénea. El proceso de cocción era mucho más rápido y se reducían al mínimo las pérdidas de calor. El primer horno de este tipo para producir cemento por vía seca se instaló por primera vez en Inglaterra en 1885.
1890. Navarro y Giron perfeccionan los hornos rotatorios y construyen la gran fábrica Atlas en Pennsylvania, USA
Los primeros hornos rotatorios estaban limitados por su sistema de alimentación con gasógeno y no tuvieron por ello demasiado éxito. El perfeccionamiento de esta tecnología tuvo lugar en los Estados Unidos de América, con la contribución decisiva del español Francisco de Navarro
y el francés Giron.
Contratados ambos por la famosa fábrica de cemento Atlas de Pennsylvania, entre las mejoras que introdujeron en los hornos, proseguidas después por los norteamericanos Hung y Seaman, estuvo la sustitución del gasógeno por petróleo. La vía seca con hornos rotatorios quedaba así definitivamente consolidada como el mejor procedimiento para la fabricación del cemento y empezó a expandirse por todo el mundo. Pronto sería adoptada en Alemania por la relevante fábrica de Heemmoor.
