Gabriel Rebollo y Canales
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Terminó sus estudios de ingeniero en 1898, quedando destinado en su provincia natal de Segovia, donde se orientó hacia los estudios de caminos y carreteras.
En 1901 se incorporó a la casa Hennebique y, cuando Ribera dejó la organización ese año, retomó el proyecto del puente sobre el rÃo Caudal en Mieres, finalmente no construido, entre otras obras de la firma.
Tras abandonar la empresa Hennebique, emprendió en 1902 su propia aventura empresarial.
Su reputación como constructor de puentes y especialista en hormigón armado, le valió a Gabriel Rebollo en 1911 el encargo de una de sus más brillantes construcciones, la del puente de San Miguel en Huesca. Y, aunque desarrolló hasta su muerte una fructÃfera actividad en el Consejo Superior de Ferrocarriles, ésta es una de sus últimas obras conocidas en este campo
